El pico va sobre la piedra una y otra vez. Teodoro Gutiérrez, 44 años, sin camisa, pelo negro y ojos tristes, es quien levanta el brazo para golpear las rocas con un pico metálico, hachas y mazos.
Tras los golpes de Gutiérrez, las piedras gimen y sueltan polvo, hasta ceder a los deseos del artesano, que quiere ver a una diosa de la fertilidad.
Gutiérrez habita en San Juan de Oriente, Masaya, y se gana la vida pegándole a las piedras pómez, lavada o volcánica, que provienen de los alrededores de la laguna de Apoyo.
Primero, elige la piedra. Después, decide en qué la convertirá.
Gutiérrez, el maestro, enseña a su familia que para estabilizar la roca en el suelo la tienen que rodear con la planta de sus pies, para amansarla. Al final, los golpes. Los primeros muy fuertes, los últimos son delicados.
Esta pequeña empresa es familiar, trabajo con mi hijo, Juan Gregorio, y mi nuera, Cinthia Jara, que está aprendiendo el oficio”. Teodoro Gutiérrez, artesano.
“He trabajado diseños propios, he elaborado entre 30 y 50. Mis principales clientes son de acá, de San Juan de Oriente. A la alcaldía de este municipio les elaboré 16 ídolos, de los cuales 14 quedaron aquí y dos se fueron a Masaya”, dijo el artesano. Las piedras, ya convertidas en dioses, se asoman a la calle en forma de batallón: ordenadas por tamaño, del más pequeño al más grande, hasta ser vendidos.
La casa
Gutiérrez, a cuya familia conocen en San Juan de Oriente como “Los Picapiedra”, reveló que sus obras cuestan entre C$50 y C$800.
La casa de los Gutiérrez, donde reinan los mazos y las piedras, es de las más ruidosas en San Juan de Oriente, una localidad con clima fresco y productora de artesanos.
“He hecho réplicas de la diosa de la fertilidad, de la diosa del maíz, el dios lagarto, el dios del agua, el dios sol, etcétera, en todos sus tamaños”, precisó Gutiérrez.
El líder de “Los Picapiedra” lamenta una sola cosa: la falta de promoción que tienen los artesanos de San Juan de Oriente.
En su caso, indicó, trabaja por encargos. Sus clientes le llevan los diseños y él produce las réplicas.
La familia de los Gutiérrez habita de la iglesia Bautista, media al sur, media al este, en San Juan de Oriente. Su teléfono es: 87811832.