Las autoridades nacionales hicieron sonar ayer las sirenas de alerta de tsunami en toda la costa del Pacífico y movilizó a la población de las comunidades costeras, tras el sismo de magnitud 8.4 grados en la escala abierta de Richter que ocurrió anoche en el centro de Chile.
El asesor presidencial para temas de riesgo, Guillermo González, señaló a medios del Gobierno que a las 6:29 se hicieron sonar las sirenas e inmediatamente se activó un mecanismo de movilización de las comunidades costeras, instadas a buscar zonas de seguridad.
La movilización tuvo lugar después de que el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico de EE.UU. emitiera un aviso de tsunami por olas de más de tres metros en Chile, tras un sismo que alcanzó una magnitud de 8.4 en la escala de Richter y señalara que olas de hasta un metro pueden impactar también en México, Japón, Hawái, Rusia y partes de Centroamérica y Oceanía.
SISTEMA EFECTIVO
González dijo que en pocos minutos las 83 comunidades que están en riesgo cuando se producen estos fenómenos llevaron a cabo la movilización hacia zonas más seguras.
“La evaluación que tenemos es que prácticamente funcionaron todas las sirenas, excepto tres, que se tuvieron que activar posteriormente, lo cual contribuyó a que la población tuviera la información de la alerta inmediata”, añadió.
Sostuvo que la movilización de la población se logró con éxito, lo que “nos da bastante garantía de que a la hora de una situación de mayor envergadura que se nos pueda presentar podamos ponerla en práctica”.
González indicó que todos los organismos de auxilio están en comunicación, entre estos consejos municipales, Defensa Civil y Dirección General de Bomberos, entre otros.
EN ALERTA
Después de las ocho de la noche de ayer, las familias podían regresar a sus casas, explicó el funcionario, aunque añadió que estas deben mantenerse pendientes de cualquier situación.
Por su parte, la coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo, recordó ayer que Nicaragua enfrenta desde el pasado viernes un enjambre sísmico en el Occidente del país, donde se encuentran expertos nicaragüenses, de El Salvador y de Cuba para presentar al presidente Daniel Ortega un informe con una perspectiva más profunda sobre el fenómeno.
Murillo manifestó a Chile la solidaridad de Nicaragua tras el sismo.
“Nuestros hermanos chilenos tienen amplia experiencia y sabemos que la capacidad instalada está allí, tanto en términos de las instituciones, de las entidades, como en términos de todo el aprendizaje de la población para enfrentar este nuevo desafío de la naturaleza”, añadió Murillo. Al menos unas veinte réplicas, algunas de ellas de magnitud 6, se han sentido tras el fuerte terremoto que estremeció Chile desde Atacama, en el norte, hasta la zona de la Araucanía, en el sur.