Desde el punto de vista de la maquillista profesional Jackeline Álvarez, el maquillaje para fotos requiere de un mayor cuidado y precisión que aquel maquillaje que se lleva a diario, esto gracias a que la intención de preservar una bonita imagen mediante una fotografía implica tener presente ciertos detalles en el rostro para potenciarlo y asimismo descubrir qué es exactamente lo que se debe camuflar.
Consejos
“Lo más probable es que la piel quede un poco cargada, pero si se enfocan adecuadamente los cosméticos, esta característica será la que justamente te lleve hacia el triunfo”, dice Álvarez. Es por ello que para salir perfecta en las fotos, hay que empezar por preparar adecuadamente el cutis mediante la aplicación de correctores y bases que en función del tipo de piel puedan eliminar al menos temporalmente las ojeras, líneas de expresión y posibles arrugas. Una mirada luminosa y llena de energía jamás debe estar enmarcada por círculos negros o rodeados de pliegues.
Al unificar el rostro, empleá productos con efecto mate para lograr disminuir posibles brillos. De igual forma, es muy apropiado aplicar toques estratégicos de iluminador, por ejemplo a la altura de los pómulos, en el centro de la frente o quizás sobre el labio superior. Para el maquillaje de ojos son mejores las sombras claras y sin pigmentos brillantes, tanto el delineador como el rímel ayudan más si son de tono negro. Curvá muy bien tus pestañas haciendo énfasis en las de la parte exterior para abrir la mirada y no pasés por alto el perfilar tus cejas.
El maquillaje para salir bien en las fotos se encarga de la equilibrada aplicación de un rubor a juego con el tono de piel y del uso de un lipstick cuyo color destaque un poco, dando frescura para procurar ese efecto de lindo rostro. Para terminar, podés aplicarte una ligera capa con polvos traslúcidos. Algunos incluso tienen formulaciones especiales para el maquillaje de fotografía.
Cejas
Unas cejas bien definidas son esenciales. Maquillalas lo más cercano posible a tu color de cabello o tal vez un tanto más oscuro. En las fotografías, el dicho de menos es más ¡no sirve!
Rostro
Lo más importante es quitarte brillos en partes como la frente, que hace que parezcás que estás sudando. Marcá bien el pómulo con un colorete marrón aplicándote un buen brochazo por debajo del hueso. Extendé bien la base de maquillaje y difuminala hacia el cuello para que no haya diferencia entre el escote y el rostro.
Ojos
No utilicés sombras de ojos con brillos si tenés los ojos saltones, porque solo conseguirías pronunciarlos más. También evitá las sombras oscuras si tenés los ojos pequeños y hundidos. Rizate bien las pestañas, esto te abrirá más los ojos y le dará más fuerza a tu mirada.
Labios
Delineá tus labios y optá por los tonos fuertes para que tus dientes luzcan más blancos. Los labiales claros o escarchados no lucen en las sesiones de fotos. Para un maquillaje natural, aplicá brillo o un nude oscuro.