De enero a julio de este año se han judicializado tres secuestros simples o extorsivos y uno está en proceso en los Juzgados de Managua, mientras que la cifra total en 2015 fue de 12.
Las edades de las víctimas de este delito son diversas y la última fue elniño recién nacido Betzael Orozco Flores, quien fue secuestrado por una mujer y su marido con la ayuda de tres trabajadores del Hospital Alemán Nicaragüense el propio Día Internacional del Niño, 1 de junio de este año.
El caso conmocionó al país y fue resuelto el pasado nueve de julio, cuando las autoridades dieron con el paradero del pequeño. La Fiscalía acusó a Wanky Monge Altamirano y a su esposo Túpac Amaru Murillo como los secuestradores. Julia Antonia Monge Altamirano y Mario de Jesús Muñoz Areas fueron acusados como cómplices de dicho delito y Ana Guadalupe García Valdivia, como encubridora. Estos enfrentarán audiencia inicial el próximo 25 de julio.
El Código Procesal Penal en el artículo 163 establece que “comete el secuestro simple quien sustraiga, retenga u oculte a una persona contra su voluntad e incurrirá en prisión de tres a seis años y de cien a trescientos días multa”.
Mientras que el artículo 164 determina el secuestro extorsivo como “quien secuestre a una persona con el propósito de exigir por su libertad un provecho, rescate o cualquier utilidad, o para que se haga u omita algo, o con fines publicitarios o de carácter político, será sancionado con pena de cinco a diez años de prisión”.
POCOS NIÑOS SUSTRAÍDOS
Cifras de los Juzgados de Familia indican que en el año 2015, solamente se juzgó un caso por el delito de restitución internacional por sustracción de menores, mientras que de enero a junio de 2016 la cifra es la misma.
La juez Enlace de Restitución Internacional de Sustracción de Menores, María José Aráuz, aseguró que el año pasado Nicaragua como país requirente —es decir que solicita el regreso de un infante a territorio nacional— registró 25 causas, mientras que como país requerido, 17.
Cabe señalar que la mayoría de los casos no llegan a judicializarse ya que son resueltos en la vía administrativa, es decir, con el involucramiento del Ministerio de la Familia.
“El artículo 218 del Código Penal indica que la sustracción internacional habla de familiares, es decir cuando un familiar sin mediar las circunstancias del secuestro sustrae a un menor de edad o a una persona incapaz… (mientras) que el secuestro o secuestro simple no tiene un vínculo familiar”, explicó Aráuz en relación a la diferencia de los tipos penales.
En octubre de 2012, Nicaragua fue firmante del Protocolo de Aplicación de las Normas Internacionales de sustracción y restitución de niños, niñas y adolescentes. Hasta 2014 el país contabilizaba cuatro casos resueltos en la vía judicial, 19 tramitaba como Estado requirente y 15 como Estado requerido.
En los únicos dos casos judicializados en 2015 y 2016, quienes requerían restituir a los pequeños en sus países fueron extranjeros. En el caso del año pasado, la autoridad judicial resolvió la demanda dando lugar al desistimiento de la parte demandante, que al final se puso de acuerdo con la parte demandada en aras del interés superior del niño.
En el caso registrado este año, el juez no admitió la demanda porque la parte demandante no agotó la vía administrativa, es decir que no presentó el caso ante el Ministerio de la Familia (Mifamilia), instancia también conocida como autoridad central cuando se habla de restitución de menores.
CSJ: “Nicaragua ha cumplido”
“Nicaragua está cumpliendo en los fallos judiciales y administrativos en materia de sustracción y restitución internacional de niños, niñas y adolescentes de acuerdo a lo establecido en los Convenios de La Haya, de los que Nicaragua es firmante”, aseguró la magistrada Alba Luz Ramos, presidenta del Poder Judicial en mayo del año pasado en una reunión que sostuvo con representantes de la embajada de Estados Unidos.
El pasado 17 de noviembre de 2015, la periodista Ximena Gutiérrez pasó por malos momentos, luego que su exesposo de origen alemán, Michael Sahm, intentara llevarse sin su autorización al hijo que procrearon, Arún Valentín Gutiérrez Sahm. Después que la afectada hiciera pública su denuncia y señalara retardación de justicia en su caso, el problema fue resuelto.