Un grupo de ambientalistas de Costa Rica anunció hoy que envió una carta a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) para pedirle que ordene la protección de zonas arqueológicas cercanas a un sitio Patrimonio de la Humanidad, ante la cercanía de un proyecto de siembra de piña.
Un portavoz de la Federación Ecologista (Fecon) explicó a Efe que la carta fue firmada por "cientos de personas y organizaciones" y enviada a Montserrat Martell, que forma parte de la representación para Costa Rica del Centro del Patrimonio Mundial Unesco.
En la misiva se solicita a la Unesco que incluya el proyecto de piña de la empresa PINDECO, de la trasnacional Del Monte, en la ampliación del "Estudio de impacto patrimonial" sobre la zona arqueológica de las esferas de piedra precolombinas, ubicada en el cantón de Osa, provincia de Puntarenas, en el sur de Costa Rica.
En ese estudio, que está llevando a cabo la Unesco, también están incluidos el proyecto hidroeléctrico El Diquís y el proyecto del Aeropuerto Internacional de Osa.
Los ambientalistas piden a la Unesco ampliar la protección a las fincas donde se planea sembrar piña, pues allí hay sitios arqueológicos"considerados de importancia patrimonial y de alto grado de monumentalidad".
"Es importante considerar que esos sitios no pueden ser evaluados independientemente de todo el conjunto del patrimonio", señaló Fecon.
Los ambientalistas aseguran que la Secretaría Técnica Ambiental (Setena), del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), obvió una serie de obligaciones por "la rapidez y la superficialidad del procedimiento para otorgar la viabilidad" del proyecto piñero.
"La instalación y operación de una finca piñera implica no solamente el cultivo, si no diversas infraestructuras que generan movimientos frecuentes de maquinaria y acarreo de materiales, que podrían alterar rasgos culturales ya identificados como esferas, espigas y columnas", afirmaron los ambientalistas.
Tras haberle otorgado los permisos ambientales en diciembre anterior, la Setena, a solicitud del Minae, frenó el proyecto piñero el pasado 18 de mayo hasta que no se solucionen "varios aspectos" relacionados a sitios arqueológicos y humedales.
Según los ambientalistas, el proyecto piñero de 600 hectáreas, pone en riesgo humedales y sitios arqueológicos que podrían estar conectados con las esferas de piedra precolombinas ubicadas a pocos kilómetros en cuatro sitios arqueológicos declarados por la Unesco en 2014 como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
El Museo Nacional tiene registrados cerca de 200 sitios arqueológicos de la época precolombina en el cantón de Osa, de los cuales, a la fecha, se conocen siete dentro del área del proyecto de la compañía piñera que abarcan unas 56 hectáreas.
Las esferas de piedra precolombinas son únicas en el mundo y fueron elaboradas por indígenas del sur de Costa Rica con fines astronómicos, sociales y artísticos, entre los años 300 y 1.500 d. C., y es posible que muchas de ellas estén enterradas en la zona.
La Cámara Nacional de Productores y Exportadores de Piña ha asegurado que el Plan de Gestión Ambiental de la empresa garantiza la protección de los humedales y la riqueza arqueológica.